
Existen muchas fórmulas para ir de vacaciones: desde un resort en la playa hasta un viaje extremo de aventura. Pero en todos esos viajes hay dos necesidades básicas a resolver: desplazamiento y sueño. Es necesario un medio para trasladarse hasta el lugar vacacional y una comodidad para dormir y descansar el cuerpo (incluso si se trata de un catre o una esterilla). Y luego está esa herramienta que combina en una sola instalación la respuesta a ambas necesidades: la autocaravana.
Miles de españoles eligen cada año unas vacaciones on the road, en las que el destino no es tan importante como el viaje, en las que los kilómetros de autopista al son de la música no son un trámite inevitable, sino una parte esencial de las propias vacaciones. Y como cada tipo de viaje tiene sus particularidades y sus riesgos específicos, vamos a hacer un repaso de lo que no debe faltar en tu botiquín si decides realizar un viaje en autocaravana este verano.
Vamos a enfocarnos en las dos fases del viaje en autocaravana: conducción y descanso. ¿Qué consejos podemos tener en cuenta a la hora de afrontar un viaje con tantas horas de carretera por delante?
- Gafas de sol. Las gafas de sol no son un mero complemento de moda, sino que protegen los ojos de la radiación ultravioleta y, en la carretera, nos ayuda a reducir el deslumbramiento y tener una visibilidad mucho mayor. En definitiva, nos aportan seguridad, y como tal, hay que ser precavidos al elegirlas, comprobar que tienen la etiqueta CE (que certifica que cumplen con la normativa europea de sanidad y seguridad), la categoría de filtro de color adecuada y un alto grado de protección ultravioleta.
- Agua. Tener un botellín de agua cerca para beber en cada parada (no conduciendo) ayudará a mantener la garganta hidratada y reducir molestias por el aire acondicionado.
- Pastillas para el mareo. Esto es más para los pasajeros que para el conductor, ya que podrían tener contraindicaciones para la conducción.
- Comprobar efectos secundarios de la medicación. La farmacia puede ser de gran ayuda para informar al conductor o conductores de si alguno de los fármacos que están tomando pueden provocar efectos como somnolencia y habría que evitar el manejo de vehículos bajo sus efectos.
- Parar cada dos horas como máximo. Conducir más de dos horas sin parar puede provocar cansancio y pérdida de concentración al conductor. Es conveniente parar cada cierto tiempo y, a ser posible, turnar conductores.
- El sueño. Es importante dormir bien cada noche, para coger el vehículo despejados al día siguiente. Que los colchones sean cómodos y la temperatura agradable serán factores importantes a tener en cuenta.
- Mosquitos. Si dormimos con las ventanas de la caravana abiertas los mosquitos pueden ser un engorro. Podría ser útil el uso de mosquiteras, o llevar repelente de mosquitos.
- Molestias digestivas. Una mala digestión puede acarrear una noche horrible, penalizar el descanso y provocar que el conductor se encuentre cansado al día siguiente. Si se planea incorporar un elemento de gastronomía a las vacaciones, puede ser de utilidad contar con una mezcla de pancreatina, una mezcla de enzimas digestivas que contribuye a aliviar las digestiones pesadas, con simeticona, que ayuda a prevenir la formación de gases.
Si se tomas las precauciones adecuadas, con mucha ilusión en la maleta y muchas ganas de disfrutar, no hay razón para que este viaje quede grabado para siempre en la mente de los viajeros.