
Ya estamos a las puertas de completar un nuevo año, un 2021 con muchos vaivenes y desafíos para la farmacia comunitaria pero que como cada curso termina llegando a su fin. La profesión farmacéutica ha vuelto a demostrar que es un pilar clave para los pacientes, tanto como establecimiento sanitario como agente social.
Las semanas navideñas están marcadas por los cambios de rutina debido a las visitas familiares, a las cenas de empresa, a las reuniones de amigos… Como consecuencia de todos estos cambios, sumados a la llegada del invierno y la bajada de temperaturas, hay algunas consultas que se vuelven más recurrentes en estas fechas.
- En estas fechas se disparan los casos de gripe y resfriados (sin olvidarnos, por supuesto, de la COVID-19). Aunque lo mejor es incrementar las medidas de prevención como una buena higiene de manos o la ventilación de espacios cerrados, muchas veces el contagio resulta inevitable. Desde la farmacia se pueden recomendar distintos fármacos antigripales para el abordaje de los síntomas, y valorar la derivación al médico en casos de riesgo (personas mayores, pacientes crónicos, etc.).
- Pesadez y molestias estomacales. Los banquetes navideños, en los que recomendamos siempre evitar excesos, pueden resultar en situaciones de pesadez estomacal o gases intestinales. Desde el mostrador de la farmacia, además de recomendar moderación y un buen masticado de los alimentos, se pueden ofrecer productos para modificar la tensión superficial de las burbujas de gas o para el alivio sintomático de la pesadez de estómago y las digestiones lentas.
- Dudas sobre el COVID-19. Con el SARS-CoV-2 aún presente y las cenas familiares a la vuelta de la esquina, aumentan las dudas sobre cómo afrontar los distintos eventos sociales. El mostrador de la botica es un punto de referencia para ofrecer información fidedigna y tranquilidad a los pacientes, resolver sus dudas e incidir en las medidas de precaución recomendadas.
Además de atender éstas y otras consultas, no olvidemos las fechas en las que nos encontramos; decorar el escaparate con motivos navideños y felicitar las fiestas siempre ayuda a aportar un poco de calor humano a los clientes de la farmacia.