
En el contexto del Día Mundial del Medioambiente, todos los focos de atención están puestos sobre uno de los principales problemas de contaminación a escala global: la polución del aire. Mejorar la calidad del aire que respiramos se antoja fundamental durante las próximas décadas si queremos combatir los nocivos efectos de la contaminación.
Algunas personas podrían pensar que la polución es un asunto meramente medioambiental, sin cabida en un portal sobre salud, pero lo cierto es que los efectos de la contaminación no se limitan a la salud del planeta, sino que afecta a todos sus habitantes. No debemos menospreciar el impacto que polución de las ciudades tiene en diferentes áreas de nuestra salud, y cómo esto afecta a millones de personas en todo el planeta.
Problemas respiratorios derivados de la contaminación atmosférica
Uno de los sistemas de nuestro organismo más afectados por la polución es el respiratorio. Según la OMS, los pacientes asmáticos que viven en entornos con niveles elevados de contaminación tienen un mayor riesgo de sufrir una crisis asmática. Los picos de partículas contaminantes en el aire se asocian, según artículos publicados en la revista de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, con un incremento en el riesgo de sufrir enfermedades respiratorias como el asma o la EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica).
A una parte de los casos de asma diagnosticado anualmente se les atribuye, según ciertos estudios biológicos, una relación causal con la contaminación medioambiental. La acumulación en el aire de diversas sustancias como partículas diésel, ozono, anhídrido sulfuroso u óxido nitroso se vincula con la aparición de síntomas asmáticos y el aumento de las consultas de urgencias y hospitalizaciones.
Riesgo cardiovascular vinculado a la polución
Quizás no hay tanta concienciación pública como en el caso anterior, pero la contaminación atmosférica es un factor de riesgo cardiovascular. La Sociedad Española de Cardiología considera la polución ambiental como uno de los principales factores de riesgo modificables en la prevención de enfermedad cardiovascular.
La exposición constante a partículas contaminantes en el aire (en especial las PM 2,5) no sólo se considera un factor que incrementa la posibilidad de desarrollo de algunas enfermedades como hipertensión o diabetes mellitus tipo 2, sino que además contribuyen a la aparición de complicaciones asociadas a esas patologías.
Una lucha global por la salud de todas las personas
El abordaje global de la problemática de la contaminación ambiental no sólo contribuirá a limpiar las ciudades y a la higiene del aire de nuestras ciudades, sino que impactará positivamente en la salud de todas las personas.